Contraloría desestimó presentación del Municipio de Chile Chico y ordena revocar despido de funcionario

Si habláramos en términos futbolísticos 2 a 0 ha ganado el funcionario de la escuela básica de Chile Chico, Álvaro Velásquez, a la Municipalidad encabezada por Luperciano Muñoz, quien el 01 de julio pasado despidió a Velásquez y en un segundo dictamen la Contraloría Regional da la razón al trabajador y ordenó que se revoque su desvinculación y lo reincorpore en los mismos términos de su última contratación.

“Este segundo dictamen que he recibido por parte de la Contraloría, el cual desestima la solicitud de reconsideración que realizó la Municipalidad de Chile Chico, respecto a la desvinculación que sufrí el 1 de julio de este año, en donde se me había desvinculado por necesidad de la empresa. Nosotros desde ese mismo día informamos y comunicamos a toda la gente del área administrativa del departamento de educación, el error que se estaba cometiendo. Desgraciadamente se actúa con cierta tozudez, en que no se escucha a los funcionarios, donde existe un doble discurso, por un lado decir que desvinculamos a personal por necesidades de la empresa y por otro lado empieza a aparecer gente contratada. Ya llevan tres o cuatro funcionarios o funcionarias contratadas en la escuela, asumiendo distintas funciones administrativas, sin ningún tipo de idoneidad psicológica”.

Velásquez, añade que, “es incomoda esta situación porque ya son cinco meses separado de mi trabajo, cinco meses en plena pandemia en donde uno no recibe un sueldo, gracias a Dios yo tengo un emprendimiento familiar y por ahí uno se puede levantar un poco. Pero sin duda que estos tiempos son muy complicados para estar sin trabajo, pero aquí no hay solidaridad con la gente, el Alcalde decía la otra vez que no podía dormir pensando en la gente que tenía que despedir del municipio con el dolor de su alma. Pero por otro lado, pasa la motosierra y no le importa nada, entonces, yo como lo dije hace un tiempo y lo vuelto a reiterar, no vengo con intenciones de andarme peleando con él todos los días, yo quiero trabajar, hacer mi pega, la plata no la paga él la paga el Ministerio de Educación”.

La determinación de Contraloría es un precedente para otros funcionarios municipales y para la forma de actuar del Alcalde, agregó Álvaro Velásquez.

“Y esto marca un precedente para los demás colegas que han sido amedrentados, que se les ha hecho circular, porque es el estilo de él, tirar comentarios a través de su círculo más cercano para que la gente escuche, que a fin de año se viene la podadora, que a fin de año vienen los despidos. Pero aquí queda claramente demostrado que no puede estar sacando a la gente como a él se le ocurre, ni menos por esas causales que aludieron en una carta demasiado básica, que confeccionaron para notificarme de mi despido”.

Velásquez, asegura que el Alcalde Luperciano Muñoz, está cometiendo una falta muy grave al no acatar un dictamen de Contraloría.

“Acá se configura una falta muy grave de parte de él al no acatar un dictamen de Contraloría, eso ya está claramente tipificado, aquí en el dictamen está claramente establecido que, de no acatar un dictamen de la Contraloría acarrea faltas administrativas de quienes deben como funcionarios públicos darle cumplimiento. Así es que, vuelvo a reiterar el doble discurso del señor Alcalde, que por un lado dice que él no viola la ley, son frases muy repetitivas que él es respetuoso del órgano de control y resulta que aquí se ve claramente que él cuando puede lo vulnera todo”.

Hasta antes de ser despedido, Álvaro Velásquez, ocupaba un cargo administrativo en la escuela Básica de Chile Chico, dependiente de la Municipalidad, organismo que por orden de Contraloría Regional, debe reincorporar al trabajador a sus funciones, bajo el mismo contrato y condiciones en las que fue desvinculado.