Un hombre descubrió a sus 67 años que en el interior de su cuerpo tenía partes de genitales femeninos.
Según consigna un estudio publicado en la revista científica Urology Case Reports, el individuo acudió al hospital por una aparente hernia y le relató a los médicos que presentaba hinchazón en el lado izquierdo de la ingle desde hace 10 años.
Además, comentó que había tenido un testículo no descendido desde el nacimiento, condición que no fue un impedimento para tener una vida sexual normal y procrear tres hijos.
Tras completar los exámenes correspondientes, los médicos procedieron a realizar la cirugía correspondiente para tratar la hernia y, en su desarrollo, descubrieron que habían ovarios, cuello uterino y trompas de falopio adheridos a un testículo que, a su vez, estaba dentro de un “saco herniario”.
El texto detalla que los médicos hallaron una estructura en “forma de pera” de 5 centímetros de largo parecida a un útero, un saco escrotal de tres centímetros de tamaño normal que contenía trompas de falopio de ocho centímetros y un testículo.
