Desde este sábado 19 de febrero, quedan 20 días para que el gobierno del presidente Sebastián Piñera entregue el mando al mandatario electo, Gabriel Boric, el próximo 11 de marzo.
Tras lo anterior, el barómetro del trabajo de la Fundación Fiel y el centro de estudios MORI realizaron un estudio para analizar el balance de su gestión: Sólo el 15% de la ciudadanía califica como “bueno” sus cuatro años como mandatario.
En ese mismo sentido, el estudio, que contó con la presencia de 1.000 personas encuestadas, arrojó que un 22% de las personas califica como “buena” la dictadura militar de Augusto Pinochet.
Lo anterior concluye que el segundo periodo de Piñera es peor que la evaluación de uno de los periodos más oscuros de la historia de Chile.
Este 22/02, presentaremos una nueva edición del #BarómetroDelTrabajo. En esta oportunidad, se incluye un comparativo de percepción entre el Gobierno de Piñera y la dictadura de Pinochet, siendo el primero incluso peor evaluado q el gobierno dictatorial. Estudio completo el 22/02. pic.twitter.com/wHmYNXkTpf
— Fundación Fiel Chile #Apruebo (@FIEL_Chile) February 18, 2022
Para la directora de Latinobarómetro y fundadora de MORI Chile, Marta Lagos nunca se había tenido un porcentaje en que un presidente tenga menos apoyo que Pinochet. “Nunca en los en los 30 años que yo llevo haciendo encuestas de opinión, ninguno”, enfatizó.
“Yo creo que es un dato sumamente relevante, porque además de eso, se comprende que después de cuántos años que terminó la dictadura, tres décadas, exista esa cantidad de gente que todavía considera eso incluso mejor que el actual gobierno“, explicó la investigadora en conversación con El Mostrador.
Para Lagos, lo anterior se debe a las recientes campañas presidenciales. “Ha aumentado. El apoyo a Pinochet tuvo su peor momento en el pasado, pero ese apoyo del bien, de que fue un buen gobierno ha aumentado, llegó a ser 16%. Entonces la campaña presidencial también reavivó al pinochetismo. Lo recuperó, lo alimentó, lo concretó”, expresa.
“La elección presidencial se produjo con una dicotomía del caos o yo. Pero estos datos muestran que en realidad el apoyo que tiene la imagen de Pinochet es un apoyo muy contundente, 30 y tantos años después de haber dejado el poder. Entonces me parece que esto es una parte de cualquier ecuación política que se haga en el futuro, hay que considerar este tremendo apoyo que tiene Pinochet, que no son las cinco personas del barrio alto“, añade.
Finalmente, concluye que la irrupción del ex candidato presidencial del Frente Social Cristiano, José Antonio Kast, quien es una persona declarada como “pinochetista”, influyó en que el fenómeno de la dictadura se lograra “validar de nuevo”.
