Por unanimidad y luego de una larga tramitación el Senado aprobó en general el proyecto de reforma al Código de Aguas, de esta forma el proyecto continúa su avance en el Congreso Nacional.
Durante la discusión, la senadora Ximena Órdenes Neira recordó el mecanismo impuesto por la Dictadura para mercantilizar el agua. «El actual Código de Aguas de 1981 fue construido como una pieza más de la arquitectura neoliberal que se instaló en todas las áreas de la sociedad. El agua fue vista como un producto y se determinó que la manera más eficiente de asignarla a los distintos demandantes era generando un mercado del agua», sostuvo.
En este sentido, la parlamentaria recalcó la importancia de establecer modificaciones constitucionales respecto a uso de este vital elemento. «Se requieren de esfuerzos transversales y una priorización política de la agenda del agua, un cambio constitucional que articule hacía abajo la concepción del agua como un derecho humano», subrayó.
Finalmente, la senadora Ximena Órdenes Neira remató: «Esta reforma, con todas las mejoras que se le pueden hacer en su discusión en particular, nos acerca a ese mínimo de dignidad que toda persona se merece. Que nunca más la llave de una casa o de una escuela se quede sin agua».
Ahora la Reforma al Código de Aguas continuará su tramitación en particular en el Senado, específicamente, en las comisiones de Recursos Hídricos y Hacienda, quienes deberán revisar las indicaciones presentadas.