El consejero regional Pablo Guglielmi se reunió con pobladores de sectores cercanos al río Mañihuales, abordando con preocupación la calidad del agua en la región. En la reunión, Guglielmi solicitó a la Universidad de Aysén el acceso a los informes de estudios de agua realizados por sus investigadores, con el fin de tomar medidas urgentes para enfrentar esta situación.
Un grupo de investigadores e investigadoras de la Universidad de Aysén está desarrollando el proyecto “Sustentabilidad bajo el enfoque Una Salud en la región de Aysén”, en el que se estudia la presencia de elementos tóxicos en los ríos de la región. Los análisis revelaron concentraciones elevadas de metales pesados y elementos traza en varios sectores. La investigación incluyó muestras de agua tomadas en 30 puntos distintos de la región y detectó niveles alarmantes de arsénico en el sector del Puente Catedral (en Alto Mañihuales), superando en más de 60 veces el límite permitido para agua potable (según la norma NCh409/1), 12 veces el límite máximo establecido para la descarga de residuos en aguas continentales superficiales (Decreto 90/2001), y superando ampliamente los valores recomendados por la OMS.
Estos hallazgos resultan especialmente preocupantes, ya que el arsénico es un elemento químico de alta toxicidad cuya presencia en estos cursos de agua podría afectar a la población local que la utiliza para consumo y uso doméstico. Además, representa un riesgo para el ganado que pudiera beber esta agua y para la vegetación, que puede acumular estos elementos. En adición, la presencia de estos contaminantes ha sido anteriormente asociada a la actividad minera presente en la zona.
El consejero Guglielmi enfatizó la urgencia de tomar medidas para garantizar el acceso a agua segura para la población. “Es fundamental que se implementen políticas y programas de monitoreo y mejora de la calidad del agua en la región, protegiendo así la salud pública y el medio ambiente”, señaló.
Asimismo, destacó la importancia de los estudios que la Universidad de Aysén está desarrollando en temas territoriales que impactan directamente a la comunidad. “La comunidad de Aysén espera que se tomen acciones concretas para resolver este problema y asegurar un futuro más saludable para sus habitantes”, concluyó.
El consejero se comprometió a oficiar a las autoridades competentes en esta materia y a solicitar que el Ministerio de Salud realice un estudio en la población más afectada. La situación requiere atención inmediata para proteger la salud y el bienestar de los habitantes de Aysén.
