La iniciativa, que ahora pasa a su revisión en particular, busca terminar con el uso de la Unidad de Fomento en créditos hipotecarios, contratos de arriendo, planes de salud y en el sistema educacional.
Este miércoles se aprobó en general un proyecto que busca eliminar la Unidad de Fomento (UF) como mecanismo de reajustabilidad.
La iniciativa recibió luz verde en general por la comisión de Economía de la Cámara de Diputadas y Diputados y ahora pasará a ser discutida en particular.
Si bien son 13 los diputados que conforman esta comisión, solo estuvieron presente seis, resultando con 5 votos a favor y uno en contra. Quienes estuvieron por la afirmativa fueron los parlamentarios Víctor Pino (Demócratas), presidente de la comisión; Daniella Cicardini (PS), Daniel Manouchehri (PS) y Ana María Bravo (PS), autores de la moción; y el diputado Gonzalo Winter (FA).
El único voto en contra vino del diputado Christian Matheson (Ind-Evópoli).
¿Qué busca el proyecto de eliminación de UF?
Esta iniciativa tiene como principal fin el terminar con el uso de la UF como sistema de reajustabilidad en créditos hipotecarios, contratos de arriendo, planes de salud y en el sistema educacional.
Así, la idea es que ninguno de dichos servicios estén valorizados en UF.
Preocupación en Hacienda
Durante la sesión de la comisión de Economía estuvo presente el ministro de Hacienda, Mario Marcel, quien expresó que especial preocupación respecto a la situación de los créditos hipotecarios.
“La UF ha tenido un rol importante en el mercado de crédito hipotecario. La indexación impulsó el desarrollo de instrumentos financieros de largo plazo, fomentó el ahorro y la inversión en el sector inmobiliario, y contribuyó a la expansión del mercado hipotecario chileno”, dijo el secretario de Estado.
Destacando que dicho mercado nacional es “sustancialmente más alto que el promedio de América Latina”, Marcel afirmó que la eliminación de la UF para este tipo de créditos tendría impacto en las tasas y un acceso más restringido al financiamiento.
“Los bancos enfrentarían dificultades para gestionar el riesgo inflacionario, afectando las condiciones de financiamiento ofrecidas a los consumidores y produciendo tasas de interés más altas, condiciones de financiamiento más estrictas o un aumento de la oferta de créditos con tasas variables”, aseguró.
Fuente: cnnchile.com