Diego Cupitty: arte, ciencia y naturaleza para transformar los muros de Aysén

Geólogo y muralista, este joven busca integrar el arte con las ciencias de la tierra para promover la conciencia ambiental, la identidad territorial y el amor por la naturaleza en la región de Aysén.


Con una mirada puesta en el paisaje y la cultura local, Diego Cupitty, joven geólogo y muralista, ha emprendido una cruzada creativa para transformar las localidades de la región de Aysén en verdaderos espacios de belleza y reflexión. Su objetivo es claro: ser un aporte significativo para la comunidad, uniendo el arte, la ciencia y el entorno natural en proyectos que inspiren a valorar el territorio y su historia.

“La idea es reconectar a las y los ayseninos con su patrimonio, con ese paisaje que a veces damos por sentado, pero que tiene un valor enorme desde lo cultural, científico y emocional”, señala Diego, convencido de que el muralismo es una poderosa herramienta de comunicación colectiva.

El arte como camino y lenguaje

Desde muy joven, el arte ha sido una constante en la vida de Diego. “Crecí como muchos jóvenes de los años 90, influenciado por estilos de todo el mundo, desde animación japonesa hasta ilustración de comic europea. Ahí me atrapó el arte, y no me ha soltado hasta hoy”, cuenta.

A lo largo de los años, ha profundizado su formación en cursos y academias que le han permitido comprender que un mural es mucho más que una expresión estética. “Es una pieza de significancia cultural, un relato colectivo. No me puedo atribuir el mensaje, porque yo solo canalizo lo que la comunidad quiere transmitir. Si el mural no representa a quienes habitan ese espacio, pierde su poder comunicacional”, reflexiona.

Para Diego, el muralismo es la forma más sincera de entregar arte con sentido, de comunicar historias y visiones compartidas. “La pintura es mía y se la doy al mundo con mi intención al crearla, pero el mural tiene que ser de todos”, afirma con convicción.

Ciencia y creatividad: una fusión natural

Su formación como geólogo le ha abierto nuevas perspectivas para fusionar conocimiento científico con sensibilidad artística. “Estoy buscando integrar el arte con las geociencias. Me interesa mucho poder entregar naturaleza a través del muralismo, invitar a la comunidad a reencontrarse con su curiosidad, con el asombro por el entorno natural, que a veces se pierde entre tanto artefacto digital”, señala.

Diego ya cuenta con una trayectoria en la ilustración científica, habiendo participado recientemente en un libro sobre la geología de la Isla de Pascua, una experiencia que describe como “un viaje por la historia de la isla” y un trabajo profundamente enriquecedor.

Actualmente comparte su trabajo en redes sociales y en su sitio web, donde expone tanto sus ilustraciones científicas como sus obras murales. En Instagram, se le puede encontrar como @cupitty.silvestre, donde comienza a construir una comunidad interesada en arte, naturaleza y divulgación. Mientras que en su página web https://www.cupittyconsultor.com/ pueden encontrar su trabajo como geólogo e ilustrador científico.

Un llamado abierto a crear comunidad

Con entusiasmo y disposición, Diego hace un llamado a colaborar con todas aquellas personas e instituciones que quieran promover el amor por la naturaleza, el arte y la ciencia. “Estoy feliz de poder contribuir en cualquier proyecto que busque difundir estos valores. Hay tanto por hacer en Aysén y creo firmemente en el poder de lo colectivo para construir algo hermoso y con sentido”.

En tiempos donde el entorno natural se enfrenta a múltiples amenazas y la desconexión con el territorio crece, iniciativas como la de Diego Cuppity nos recuerdan que el arte puede ser un puente hacia la conciencia, la memoria y la acción.