En el contexto del proceso de dinamización de la Hoja de Ruta en ciencia, tecnología, conocimiento e innovación -instrumento de planificación de cara al año 2030- se reunieron 17 instituciones públicas vinculadas a los ecosistemas marinos y de agua dulce de la Macrozona Austral, en encuentros simultáneos que se realizaron en Coyhaique y Punta Arenas.
La Macrozona Austral posee una amplia superficie marítima, conformada por fiordos, canales, aguas continentales e importantes áreas marinas protegidas, dichos ecosistemas son claves para el cambio global, la conservación marina y las actividades económicas como la pesca, acuicultura y el turismo. A su vez, son críticos para el desarrollo de actividades económicas, recreativas, culturales y para la identidad de comunidades indígenas y costeras.
En este contexto, resulta urgente generar información y conocimiento sobre los ecosistemas acuáticos que permita su caracterización, disponer información actualizada, enfrentar eventos que impactan la calidad de vida de las comunidades y aportar con antecedentes para la toma de decisiones promoviendo un desarrollo sustentable de estos territorios.
De esta manera, la red colaborativa Nodo Ciencia Austral propuso generar espacios de participación con instituciones públicas cuyo quehacer se relaciona con los ecosistemas acuáticos para identificar y relevar líneas de investigación con pertinencia territorial.
Representantes de 17 servicios públicos participaron del taller “Construyendo Hoja de Ruta en Ecosistemas Acuáticos de la Macrozona Austral: «Visión Institucional» que se llevó a cabo en forma simultánea en Coyhaique y en Punta Arenas durante la mañana del 31 de octubre. En esta instancia, los actores públicos trabajaron en grupos para dialogar e identificar brechas, oportunidades, desafíos y temas de interés de su institución, que demanden la participación de los actores del ecosistema de ciencia, tecnología, conocimiento e innovación (CTCI).
En ese contexto, el director de Nodo Ciencia Austral, Dr. Juan Carlos Aravena, destacó que desde esta red colaborativa «estamos convencidos que debemos trabajar en forma colaborativa e interdisciplinariamente entre quienes componen el ecosistema de ciencia y tecnología, y con ese espíritu convocamos este encuentro entre actores públicos vinculados a los sistemas acuáticos. En la Hoja de Ruta estábamos al debe con esta área, necesitábamos reunirnos, dialogar, planificar y construir juntos en torno a las líneas prioritarias de estos ecosistemas. Hoy en este taller pudimos aprender de las demandas de estos sectores y hemos confirmado las necesidades de coordinación y articulación entre todos los actores. Con estos encuentros, seguimos fortaleciendo la red Nodo Ciencia Austral».
Este trabajo es liderado por dos de las instituciones asociadas al Nodo, el Instituto de Fomento Pesquero (IFOP) y el Centro Regional Fundación CEQUA, con el propósito de actualizar y dinamizar la Hoja de Ruta de CTCI, modificando el programa “Pesca y Acuicultura” identificado en etapas anteriores por un nuevo programa denominado “Ecosistemas Acuáticos”.
En esa línea, Alejandra Lafon, Jefa de sede Aysén de IFOP, comentó: “muchas instituciones y actividades se desarrollan en torno a los ecosistemas acuáticos, y muchas veces los actores no conversan. Cada uno los ve desde su arista o normativa, por lo tanto en esta reunión lo que se está viendo es que hay muchas similitudes, hay muchos puntos de encuentro, lo cual es vital identificar, relevar y que los distintos actores se conozcan y se den cuenta que ello ocurre para poder ir avanzando en definir líneas prioritarias”.
Por su parte, la Directora Zonal de Pesca en Magallanes, Ximena Gallardo, agradeció a Nodo Ciencia Austral por la apertura de un espacio así, “donde vamos reconociendo nuevas realidades y necesidades en torno a los ecosistemas acuáticos”. Agregó que “si bien como servicios públicos tenemos claras nuestras brechas desde el territorio, ahora estamos enfrentados a una nueva realidad, el maritorio, pese a sus riquezas tiene altas complejidades, y hoy nos pone a varios servicios públicos, no solo a los asociados a la pesca, sino también a los ligados a tierra y a las ciencias, a trabajar de manera colaborativa y eficaz para enfrentar desafíos normativos, fiscalizadores y desde el conocimiento”.
En tanto, el profesional Eduardo Barros de Nodo Ciencia Austral, concluyó que “con la cantidad de insumos que se levantaron en este taller se puede planificar una ciencia cooperativa, colaborativa y con pertinencia territorial, preguntándonos ¿qué agenda de investigación se necesita en los ecosistemas acuáticos de las regiones de Aysén y de Magallanes y Antártica Chilena?”.
A estos talleres con servicios públicos, se sumarán nuevos espacios con actores de la academia, ONGs y otras instituciones que desarrollan investigación en las regiones australes. Posteriormente, con representantes de las actividades económicas, buscando así tener una mirada integral de todos los actores que interactúan en los ecosistemas acuáticos.
Cabe señalar que, buscando aportar a la descentralización y la equidad en materia de CTCI, Nodo Ciencia Austral conforma una amplia red de trabajo colaborativo integrada por diez instituciones de la Macrozona Austral: Universidad de Magallanes, Universidad de Aysén, Centro de Investigación en Ecosistemas de la Patagonia (CIEP), Instituto Antártico Chileno (INACH), Campus Patagonia de la Universidad Austral de Chile, Red de Museos de Magallanes, Centro Internacional Cabo de Hornos (CHIC), Instituto de Fomento Pesquero (IFOP), Museo Regional de Aysén y Centro de Estudios del Cuaternario, Fuego-Patagonia y Antártica (CEQUA). Una iniciativa financiada por la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo (ANID).