Gobernadora lamenta rechazo en el CORE a proyecto de buses eléctricos para Coyhaique: «No estar en sintonía con los problemas de las personas es pecado capital en política»

Este miércoles el Pleno del Consejo Regional rechazó la iniciativa propuesta por el Ejecutivo, liderado por la Gobernadora Andrea Macías Palma, que contemplaba dotar a la comuna de Coyhaique de buses eléctricos, para proveer a la población de un sistema de transporte público acorde a las necesidades locales, una demanda histórica de quienes habitan la capital de la Región de Aysén.

Tras el término de la sesión, la máxima autoridad regional criticó abiertamente la decisión de los Consejeros y Consejeras que votaron en contra o que se abstuvieron, declarando en la misma sala que «no estar en sintonía con los problemas de las personas es pecado capital en política».

 «Ha existido un trabajo de nueve años, este es un proyecto que no nace con esta administración, un proyecto que ha venido desarrollando el Ministerio de Transporte y que venía a dar solución al gran problema de transporte público, de congestión y contaminación que existe en la ciudad de Coyhaique», señaló.

A favor de la iniciativa se manifestaron las Consejeras Regionales Paula Acuña (CS), Marisol Martínez (PS) y Paulina Hernández (DC), los Consejeros Rocco Martiniello (DC) y Sergio González (DC), y la Gobernadora Andrea Macías (PS). Por su parte, votaron en contra del proyecto las Consejeras Lilian Inostroza (UDI), María Loreta Villegas (Evópoli) y Paola Rodríguez (RN), los Consejeros Víctor Escobar (UDI), Omar Muñoz (UDI), Raúl Rudolphi (RN), Marco Gillibrand (Evópoli) y Jorge Abello (DC), mientras que el Consejero Felipe Klein (DC) optó por abstenerse.

«Como Ejecutivo lamento profundamente estas miradas, que considero que son mezquinas, que se dan en un contexto que tiene una lógica política pequeña, y que no mira en profundidad la necesidad. Hoy día las personas mayores, las personas con discapacidad, los y las estudiantes, los trabajadores, aquellos que no tienen vehículo, aquellos que andan a pata, que bajan desde el sector alto de Coyhaique a sus trabajos, todas esas personas se han visto afectadas tras este portazo que le dieron algunos Consejeros y Consejeras Regionales a esta iniciativa», aseguró la Gobernadora de Aysén.

Desde la sociedad civil, también cuestionó la decisión de quienes se opusieron a este proyecto la presidenta del Consejo de Desarrollo del Hospital de Coyhaique, Margarita Arismendi: «Pensé que los Consejeros que hemos elegido eran personas con capacidad de ver la necesidad real de la población. Nosotros, las personas con discapacidad necesitamos mucho este tipo de locomoción (…) las mamás que van con sus bebés, los abuelos. Entonces, ¿dónde está la accesibilidad que ellos pregonan y la inclusión para toda la población?».

La iniciativa, que contemplaba una inversión de más de $15 mil millones desde el Gobierno Regional, y más de $25 mil millones desde el Ministerio de Transporte, también contó con una amplia participación ciudadana, que llevó a modificar el proyecto con solicitudes emanadas desde las mismas comunidades, incluyendo en los recorridos trayectos que abarcaban las localidades de Valle Simpson, Villa Frei, El Claro y los sectores altos de la ciudad de Coyhaique, entre otros puntos.

Dentro de quienes rechazaron la propuesta, el Consejero Regional Jorge Abello planteó que existen dos situaciones por las que él y otros de sus pares no dieron el visto bueno. «Primero, esto tiene que ser financiado con recursos del sector, del Ministerio de Transportes. El Transantiago se ha llevado billones de pesos en todos estos años, por tanto, lo que se pide al Gobierno Regional, o lo que costaría en la región, es ínfimo respecto de lo que se ha aportado para otros sistemas de transporte. Y en segundo término, tienen que haber proyectos en paralelo (…) no hay nada concreto respecto de calles, tránsito y situaciones que advierten que esto todavía no está maduro», manifestó.

Por el contrario, el Consejero Rocco Martiniello, respondió estos argumentos asegurando que «estos 37 buses eléctricos, que generan más de 100 empleos, solamente con los conductores, que generan movimiento a las poblaciones, a los escolares, a los adultos mayores, hoy día los vemos nulos, porque hay un sector que dice ‘no, es que las calles están malas, que hay que cambiar los paraderos’. ¡Pero si eso se puede hacer! Hay 14 FRIL que están en poder del alcalde, hay que tener confianza con nuestras autoridades».

En ese sentido, el seremi de Transportes de Aysén, Hans Zimmermann, recalcó que «los argumentos que señalaban aquellos Consejeros que se opusieron a esta iniciativa tenían relación con la falta de infraestructura vial y el estado de las calles para que puedan circular los buses, y esas son cuestiones que se estaban trabajando en paralelo, con el municipio y el Serviu, para avanzar justamente en lo que tiene que ver con la estructura habilitante. Estaba considerado dentro del cronograma de nuestra iniciativa, y por eso lo lamentamos mucho, porque creemos que los argumentos no eran suficientes para darle la espalda así, de esta manera tan rotunda y categórica a los vecinos y vecinas de nuestra comuna, y en particular a los adultos mayores».