Implementan en Valle Simpson iniciativa piloto para deposición de vísceras del faenamiento de animales

La experiencia que busca disminuir los riesgos de contagio por Hidatidosis en la población, será monitoreada por la Seremi de Salud Aysén con el objeto de evaluar el funcionamiento e impacto sanitario a nivel intrafamiliar.

En la localidad de Valle Simpson, comuna de Coyhaique, se dio el punto de partida a un proyecto que permitirá la puesta en marcha de un programa piloto para evaluar una estrategia de control para la hidatidosis, que consiste en la entrega de una fosa sanitaria para una familia del sector,  para depositar las vísceras obtenidas del faenamiento de animales para autoconsumo, y así evitar que esta materia orgánica quede expuesta al consumo de animales, especialmente mascotas caninas, y así evitar el riesgo de Hidatidosis.

Así lo manifestó la Jefa Oficina Zoonosis y Control de Vectores de la Subsecretaría Salud Pública del Ministerio de Salud, Bárbara Hott, quien reiteró que se trata de una experiencia que busca replicarse en otros puntos de Aysén y el país.  “La entrega de vísceras crudas a los perros es el principal factor de riesgo y transmisión de la enfermedad Hidatidosis, por lo tanto, se buscaron estrategias que permitan disminuir el riesgo de contacto de los perros con este agente patógeno, y uno de las formas es entregar a la comunidad un dispositivo que permita que los desechos biológicos puedan ser guardados de una manera segura, evitando así que los perros puedan acceder o alimentarse con estas vísceras y luego puedan contagiar a las personas que están en contacto con ellos. Entonces la entrega de estos dispositivos tiene el objetivo de probar si funcionan, de consultar a la comunidad a través de una encuesta que se realizará cada 3 meses, si el dispositivo cumple con los objetivos.  Si los resultados de esta estrategia que parte en Aysén son positivos, esta iniciativa se desplegará también dentro de Aysén y a otras regiones”.

Por su parte, José Muñoz, Vecino de Valle Simpson quien recibió este contenedor, valoró la puesta en marcha de este programa en su predio.  “Yo, las vísceras las entierro o las quemo, se me han muerto ovejas y las dejo enterradas. Por eso que este aporte, lo encuentro muy bueno porque a la vez sirve para la limpieza, para que no siga la hidatidosis, por lo tanto, esto es muy bueno”.

De esta forma, el profesional de la Unidad de Zoonosis de la Seremi de Salud Aysén, Patricio Manríquez, recalcó el uso que se debe entregar a este receptáculo.  “La fosa esta destinada para la eliminación de vísceras de faenamiento intradomiciliario en predios rurales, y lo que se debe eliminar aquí son los órganos rojos que son pulmones, hígado y riñones; mientras que lo que es cuero, patas, cabeza y vísceras verdes, deben ser eliminados en otros sectores, porque lo que se busca con el contenedor es que a través de la descomposición se vaya disminuyendo el volumen, ya que el contenedor al ser de plástico es resistente al deterioro del tiempo, impidiendo el acceso de animales como perros u otros carnívoros a estas vísceras”.

A nivel regional se contempla la entrega de alrededor de 13 fosas sanitarias, cuya evaluación estará a cargo de la Unidad de Zoonosis de la Seremi de Salud, a través de monitoreos y consulta directa a los predios donde se instalen estos receptores para prevenir la propagación de la Hidatidosis.

La Hidatidosis

La hidatidosis es una enfermedad producida por un parásito que se llama Echinococcus granulosus y que transmite el perro a través de sus deposiciones. La infección se produce cuando los huevos del parásito llegan a la boca de las personas lo que puede ocurrir en actividades como: darle besos al perro, dejarse lamer por el perro, comer verduras contaminadas, tomar agua contaminada, etc.

Entre las recomendaciones para prevenir y controlar la hidatidosis se encuentran no alimentar a los perros con vísceras crudas, y no faenar de manera clandestina, además de tener los cuidados respectivos con las mascotas como vacunas al día, control veterinario y evitar que deambule sin su sujeción o correa respectiva. De igual forma, se recomienda lavarse las manos después de acariciar a un animal y lavar muy bien las frutas y verduras que se consuman crudas.